La política de la nueva ministra de Sanidad con la Teleasistencia

La nueva ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, tiene varios retos abiertos que enfrentan a su ministerio con las Autonomías por la Ley de Dependencia. Uno de ellos es el caso de la teleasistencia, ese dispositivo electrónico que llevan los ancianos para avisar si sufren algún percance.

El ministerio no quiere pagar a las comunidades por los dependientes severos y graves a los que solo se les atienda con el dispositivo de la teleasistencia. El ministerio considera que "son personas que requieren cuidados y recursos durante muchas horas al día, y el servicio de teleasistencia que se presta en la actualidad es insuficiente".

Sin embargo los gobiernos autonómicos no están por la labor y han emprendido diferentes recursos judiciales como en el caso de La Rioja que dejó de percibir dinero por esta circunstancia. Esta Autonomía alegó que su servicio de teleasistencia es más avanzado y necesitaba de mayor presupuesto. Otras, como Andalucía, tienen miles de ayudas de teleasistencia concedidas, pero si van o no acompañadas de otros servicios son datos que no se publican.

Lo que no se ha conseguido con los dependientes graves se quiere regular ahora con los moderados. El documento que el Gobierno lleva hoy al Consejo Territorial sobre los dependientes moderados, que entrarán en el sistema en enero, solo permite conceder teleasistencia si se acompaña de otros servicios para los graves, pero no para los moderados. Tampoco habrá residencias para estos últimos, pero sí paga para el familiar cuidador, aunque condicionada a requisitos más estrictos.

Fuente: El País

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